Se llama Ivan Ukhov, es ruso y salta en alto. Hasta ahí todo bien. Pero cuando le tocó participar de una competencia oficial en Lausanne el atleta se presentó a la pista borracho. Muy borracho. Tanto que no se podía ni quitar el pantalón deportivo y tuvo que recibir la ayuda de su entrenador.
Ivan tiene el record bajo techo en su país en esta especialidad, al llegar a marcar 2,33 metros y para cambiar un poco decidió competir alcoholizado. No le fue bien obviamente.
Para los espectadores del estadio fue realmente un chiste, en el video se pueden apreciar las risas de los que se encontraban en las tribunas. ¿Los organizadores? Mucho no hicieron. Ukhov saltó y dejó una pésima imagen. Las autoridades no le pagarán por su participación, lógicamente.
La IAAF ya ha abierto una investigación (aunque el alcohol no está prohibido) y le ha pedido una explicación a Ukhov. Aún no descubrieron que ingirió.
Ivan tiene el record bajo techo en su país en esta especialidad, al llegar a marcar 2,33 metros y para cambiar un poco decidió competir alcoholizado. No le fue bien obviamente.
Para los espectadores del estadio fue realmente un chiste, en el video se pueden apreciar las risas de los que se encontraban en las tribunas. ¿Los organizadores? Mucho no hicieron. Ukhov saltó y dejó una pésima imagen. Las autoridades no le pagarán por su participación, lógicamente.
La IAAF ya ha abierto una investigación (aunque el alcohol no está prohibido) y le ha pedido una explicación a Ukhov. Aún no descubrieron que ingirió.
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